Rearmando el PJ.
La estrategia diseñada por Néstor Kirchner para la reorganización de la conducción del PJ bonaerense, tras el impasse de más de cien días abierto por el alejamiento forzado de su titular, Alberto Balestrini, amenaza con sacar a la superficie viejas tensiones entre diversos sectores de la vida interna del peronismo de la Provincia.
Es que la "sugerencia" aportada por el titular del PJ nacional, orientada a que se conforme una suerte de mesa de conducción política con representación de distintos sectores y de las Secciones Electorales de la Provincia, abrió un proceso en el que abundan las incertidumbres sobre cómo debería instrumentarse ese armado, y especialmente sobre quién será el encargado de ponerlo en marcha.
El propio Kirchner se ocupó, el martes pasado, de difundir esa idea de crear una "comisión" ante diputados provinciales que le preguntaron su opinión sobre la continuidad de la actividad partidaria. Pero al pedir precisiones sobre el proceso, los legisladores se encontraron con una respuesta clara del ex Presidente: "Decídanlo ustedes, no me quiero meter".
La señal de Kirchner llegó en medio de una situación inédita en la vida institucional del armado bonaerense: acéfalo a partir de la enfermedad de Balestrini, el partido está paralizado y con un creciente movimiento de las diversas líneas que pugnan por espacios de poder en el marco de sus alistamientos para la interna y las elecciones del año que viene.
A ese escenario se agrega, además, el ya inocultable fastidio del titular de la CGT, Hugo Moyano, quien dejó trascender en reuniones con referentes del partido su malestar ante la estrategia de conformar una mesa de conducción.
Como vicepresidente primero del partido, Moyano considera que la reorganización de la conducción del PJ bonaerense "debería activar la línea de sucesión natural de cargos"; movida que lo ubicaría como titular del partido. Pero esa variante despertó fuertes reacciones y rechazos, sobre todo de intendentes del Conurbano que siempre han mantenido distancia y desconfianzas con el sindicalista.
En ese marco, la estrategia alentada por Kirchner es leída como un modo de frenar las aspiraciones de Moyano. Quizás por eso, en los últimos días dirigentes cercanos al líder camionero echaron más leña al fuego, saliendo a criticar esta idea y a advertir que no permitirán que se deje afuera del nuevo esquema a quien, consideran, debería ocupar la presidencia del PJ.
La aspiración de Moyano, sin embargo, choca contra un dato subrayado por otros sectores partidarios: mientras el presidente es elegido por el voto de los afiliados al partido, los cargos de la mesa directiva, como el que ocupa el sindicalista, son asignados por el consenso del Consejo partidario. "Por eso, no hay sucesión automática", concluyen.
DISCORDANCIAS
Con todo, la tensión abierta en torno a Moyano podría quedar sepultada por el conflicto que amenaza abrirse a la hora de llevar a la práctica la conformación de una comisión. Kirchner se ocupó de no definir el nombre del dirigente que podría ocuparse de convocar a esa discusión y laudar ante las diferencias, ni dio indicaciones sobre el mecanismo para crearla.
La incertidumbre reina, incluso, entre hombres de peso del peronismo provincial. "No vemos claro cómo debería hacerse", reconocen. En rigor, hubo un ofrecimiento al intendente de Tres de Febrero, Hugo Curto, para que fuera el encargado, como secretario general del partido, de llevar adelante el proceso. Pero la invitación chocó con la negativa del dirigente. "No quiere pelearse con Moyano", especulan.
El escenario despertó también la aspiración de otros dirigentes de ponerse al frente del proceso, desde una supuesta "bendición" de Kirchner en este sentido. Algunos apuntan, en ese sentido, al presidente de la Cámara de Diputados, Horacio González, anfitrión del reciente encuentro de legisladores con el ex Presidente, y al titular del bloque, Raúl Pérez.
Pero ese posicionamiento silencioso despertó, rápido, fuertes oposiciones. "Kirchner no les dijo que ellos se ocuparan", afirman.
En ese marco, algunos dirigentes buscan ahora instalar la idea de que la nueva comisión no se conforme desde el vacío sino que esté integrada por algunos de los 48 consejeros que conforman la estructura de conducción del partido.
"Es absurdo armar una mesa cuando el partido ya cuenta con un órgano como el que se pretende", dicen. La idea, entonces, es que, manteniendo proporcionalidades, sean actuales consejeros los que formen una "mesa chica".
"Allí están reflejados todos los sectores. Hay legisladores nacionales y provinciales, hay intendentes, está la rama femenina, la juventud, el gremialismo e, incluso, los críticos", subrayan.
Pero lo cierto es que, según reconocen sus propios protagonistas, el proceso estará colmado de conflictos y tensiones. "Se abre una negociación difícil y va a haber pelea", predicen.
1 comentarios de los usuarios
18/07/2010 - 08:33 | horacio24
Todos se pelean por los cargos pero ninguno gobernará bien la Provincia de Buenos Aires, pues en el Frente para la Victoria se oye el mismo discurso de siempre con magros salarios en los municipios (recordemos que Curto es intendente de Tres de Febrero) pero no se plantea aumentar el trabajo con más personas trabajando sino mas trabajo para las mismas personas con lo cual se incrementará la pobreza, la desocupación, la deserción escolar, etc,etc.
(http://www.notibonaerense.com/notasimp.aspx?idn=265122&ffo=20100718)
Desde una silla.
Es que la "sugerencia" aportada por el titular del PJ nacional, orientada a que se conforme una suerte de mesa de conducción política con representación de distintos sectores y de las Secciones Electorales de la Provincia, abrió un proceso en el que abundan las incertidumbres sobre cómo debería instrumentarse ese armado, y especialmente sobre quién será el encargado de ponerlo en marcha.
El propio Kirchner se ocupó, el martes pasado, de difundir esa idea de crear una "comisión" ante diputados provinciales que le preguntaron su opinión sobre la continuidad de la actividad partidaria. Pero al pedir precisiones sobre el proceso, los legisladores se encontraron con una respuesta clara del ex Presidente: "Decídanlo ustedes, no me quiero meter".
La señal de Kirchner llegó en medio de una situación inédita en la vida institucional del armado bonaerense: acéfalo a partir de la enfermedad de Balestrini, el partido está paralizado y con un creciente movimiento de las diversas líneas que pugnan por espacios de poder en el marco de sus alistamientos para la interna y las elecciones del año que viene.
A ese escenario se agrega, además, el ya inocultable fastidio del titular de la CGT, Hugo Moyano, quien dejó trascender en reuniones con referentes del partido su malestar ante la estrategia de conformar una mesa de conducción.
Como vicepresidente primero del partido, Moyano considera que la reorganización de la conducción del PJ bonaerense "debería activar la línea de sucesión natural de cargos"; movida que lo ubicaría como titular del partido. Pero esa variante despertó fuertes reacciones y rechazos, sobre todo de intendentes del Conurbano que siempre han mantenido distancia y desconfianzas con el sindicalista.
En ese marco, la estrategia alentada por Kirchner es leída como un modo de frenar las aspiraciones de Moyano. Quizás por eso, en los últimos días dirigentes cercanos al líder camionero echaron más leña al fuego, saliendo a criticar esta idea y a advertir que no permitirán que se deje afuera del nuevo esquema a quien, consideran, debería ocupar la presidencia del PJ.
La aspiración de Moyano, sin embargo, choca contra un dato subrayado por otros sectores partidarios: mientras el presidente es elegido por el voto de los afiliados al partido, los cargos de la mesa directiva, como el que ocupa el sindicalista, son asignados por el consenso del Consejo partidario. "Por eso, no hay sucesión automática", concluyen.
DISCORDANCIAS
Con todo, la tensión abierta en torno a Moyano podría quedar sepultada por el conflicto que amenaza abrirse a la hora de llevar a la práctica la conformación de una comisión. Kirchner se ocupó de no definir el nombre del dirigente que podría ocuparse de convocar a esa discusión y laudar ante las diferencias, ni dio indicaciones sobre el mecanismo para crearla.
La incertidumbre reina, incluso, entre hombres de peso del peronismo provincial. "No vemos claro cómo debería hacerse", reconocen. En rigor, hubo un ofrecimiento al intendente de Tres de Febrero, Hugo Curto, para que fuera el encargado, como secretario general del partido, de llevar adelante el proceso. Pero la invitación chocó con la negativa del dirigente. "No quiere pelearse con Moyano", especulan.
El escenario despertó también la aspiración de otros dirigentes de ponerse al frente del proceso, desde una supuesta "bendición" de Kirchner en este sentido. Algunos apuntan, en ese sentido, al presidente de la Cámara de Diputados, Horacio González, anfitrión del reciente encuentro de legisladores con el ex Presidente, y al titular del bloque, Raúl Pérez.
Pero ese posicionamiento silencioso despertó, rápido, fuertes oposiciones. "Kirchner no les dijo que ellos se ocuparan", afirman.
En ese marco, algunos dirigentes buscan ahora instalar la idea de que la nueva comisión no se conforme desde el vacío sino que esté integrada por algunos de los 48 consejeros que conforman la estructura de conducción del partido.
"Es absurdo armar una mesa cuando el partido ya cuenta con un órgano como el que se pretende", dicen. La idea, entonces, es que, manteniendo proporcionalidades, sean actuales consejeros los que formen una "mesa chica".
"Allí están reflejados todos los sectores. Hay legisladores nacionales y provinciales, hay intendentes, está la rama femenina, la juventud, el gremialismo e, incluso, los críticos", subrayan.
Pero lo cierto es que, según reconocen sus propios protagonistas, el proceso estará colmado de conflictos y tensiones. "Se abre una negociación difícil y va a haber pelea", predicen.
1 comentarios de los usuarios
18/07/2010 - 08:33 | horacio24
Todos se pelean por los cargos pero ninguno gobernará bien la Provincia de Buenos Aires, pues en el Frente para la Victoria se oye el mismo discurso de siempre con magros salarios en los municipios (recordemos que Curto es intendente de Tres de Febrero) pero no se plantea aumentar el trabajo con más personas trabajando sino mas trabajo para las mismas personas con lo cual se incrementará la pobreza, la desocupación, la deserción escolar, etc,etc.
(http://www.notibonaerense.com/notasimp.aspx?idn=265122&ffo=20100718)
Desde una silla.
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